Teniendo sexo
Las cosas siempre se van de las manos o no?
Débora y yo camino a la perversión 6
El lunes y Martes no trabaje en casa de Ricardo, sentía una expectativa muy grande, esperaba algo sin saber muy bien que. Con Débora todo estaba normal. El miércoles cuando entre en casa de Ricardo sentí algo muy fuerte, esperaba encontrar algo, pero Ricardo no estaba y nada paso. Me puse a trabajar, el trabajo me absorbe y me hace perder la noción del tiempo, cerca de las 10 de la mañana sonó mi celular, pensé que era Débora, hola
-Hola cornudo, te deje un Dvd de la fiesta con la cerdita, esta arriba del televisor de la sala, donde me la garche la primera vez, si te pajeas no me dejes todo sucio. – Ricardo hablo breve, contundente y corto-
Me fui corriendo a la sala, todo el cuerpo me temblaba de excitación, puse el dvd, se escucho la voz en off de Ricardo diciéndome que lo disfrutara, en la primera escena Débora pasaba con su ropa interior blanco y sus zapatos de taco alto, blancos también, caminaba por la sala mientras la filmaba, todas las tomas eran muy breves de unos 10 segundos, en la siguiente toma Débora tenia las tetas sobre el sujetador mientras desfilaba por la sala, luego estaban cogiendo sobre el sillón, y luego se hizo un neutro en la pantalla y la voz de Ricardo me decía, Ahora acaba con nosotros, dale cornudo pajeate. En la escena Débora de rodillas delante de Ricardo, tragando la pija hasta la garganta, la mano izquierda de Ricardo le retorcia los pezones y le sobaba las tetas, Débora lo agarraba del culo con su mano derecha para que no se escapara mientras con la izquierda se acariciaba la pepita. Así era la variación durante un largo rato hasta que Ricardo se contrajo acabando directo en la garganta de Débora que trago directamente lo que le daban, yo empecé a acabar salpicando leche por toda la sala, Ricardo la saco un poco terminando un resto en la lengua de Débora que mostró a la cámara y con cara de perversa paladeo y luego trago. Se volvió a hacer un neutro en la pantalla y la voz de Ricardo me invitaba a continuar con mis labores.
Volví al trabajo, estaba muy relajado me sentía raro pero bien. Otra vez volvió a absorberme el trabajo, me dedique a el de lleno y perdí el sentido del tiempo, ni siquiera me acorde que tenia que comer algo. Cerca de las 17 horas volvió a sonar mi celular, era Ricardo que me decía que mirara la película que dejara todo limpio y que le dejara las llaves de mi casa arriba del televisor que nos iba a visitar a la noche. Eso ya de movida me excito, fui hacia la sala mucho mas tranquilo que antes, prendí el televisor y tome asiento, estaba mas tranquilo. La escena empezó con Débora atada culo arriba en la cama un conjunto de medias rojas con portaligas, una tanga con una mariposa en la parte de arriba corrida hacia el costado y todo el culo ya lubricado, la pija de Ricardo en la entrada del ojete de Débora y esta suplicando que no le hiciera doler que fuera bien despacito, la cabeza de Ricardo paso de un saque el ojete de Débora y se junto con el grito de esta que se tenso contra el colchón queriendo escapar.
-Sacala por favor, me matas, me duele mucho, por favor…
-Si te la saco así te puedo lastimar, necesitas relajarte un poco, le sacudió el culo y se noto que sus glúteos estaban tensos, tratando de escapar de la invasión- respira hondo y aflojate, mientras le seguía sacudiendo el culo que de a poco se iba aflojando, bien profundo respira, bien hondo y flojita, en un momento el culo de Débora se sacudió bastante estaba bien floja en ese momento Ricardo metió más de la mitad de su pija en el culo de Débora-
– Así que rico culo mami… te va a ir gustando de a poco…, es un poco cabezona la mía… pero te vas a acostumbrar y te va a encantar…
– Mmmm… me duele un poco….
– Te la saco?
– Mmmm…
– Queres que la saque un poquito…
– Me siento rara…, no se….
En ese momento se hizo un neutro en la pantalla, cuando volvió la escena la cogida era a toda velocidad, le estaba taladrando el culo como un desesperado. Se escuchaba a Débora:
-Si… si que rico haceme haceme que me gusta… no pares… seguí seguí… ,así siguieron hasta que en un momento Ricardo se quedo quieto y Débora intentaba moverse bajo el.
-Te la exprimo toda hijo de puta…. si dámela bien a fondo si…. y empezó a sacudirse. Ricardo se salio de poco y jugo un poco con su dedo en el culo mostrando lo abierto que estaba y lo rojo que estaba. yo me termine de masturbar con esa imagen, viendo como el dedo de Ricardo jugaba en el culo de Débora. Saque la película y me dedique a ordenar todo, deje las llaves de casa sobre el televisor y salí para mi casa. Cuando llegue el portero estaba en la puerta de Casa, me saludo diciendo que hacia mucho que no salíamos que nos teníamos que divertir mas, le hice una mueca de sonrisa y fui al ascensor. En casa Débora me abrió la puerta, y se alejo caminando sensualmente por el comedor, tenia la misma ropa del video, el conjunto rojo con portaligas, camino moviendo el culo por la sala.
– Mira que linda me puse… Ricardo me dijo que el primer día que trabajaras te esperara así… que te lo merecías… y que era toda tuya…
Me sentí raro, mi pija estaba lejos de reaccionar estaba cansado.
– No puedo mas amor, me hice dos pajas, Ricardo me dejo un video del fin de semana, igual va a venir el mas tarde. Débora sonrío perversamente.
– Bueno en un rato cenamos así nos acostamos temprano y lo esperamos acostados. Me fui a cambiar en la cena Débora estaba brillante, estaba feliz, me mostraba como había aprendido a degustar y jugaba con su lengua en la comida y luego la tragaba.
– Como si fuera leche…. me dijo y sonrió
Después de cenar nos acostamos, Débora me desnudo y me ato a la cama. La cena mas el vino mas las dos pajas fueron nocaut para mi, me dormí al instante. Me despertó el movimiento de la cama, Ricardo estaba sobre Débora y la taladraba bien duro, las tetas de Débora sobre el sujetador se sacudían, su cara estaba toda colorada, los ojos cerrados, la boca semiabierta, Ricardo en un momento la escupió y Débora abrió más la boca para que le siguiera escupiendo, Ricardo la escupía todo el tiempo mientras la clavaba bien duro. Luego se salio de encima de ella y la acomodó como una perrita arriba mío.
la estuvo cogiendo un rato así y luego enfilo hacia el culo de Débora.
– Si es todo tuyo… hacemelo bien… -y se acerco a besarme- Ricardo la penetro despacio y agarrandola de la cintura la empezó a bombear parejo, las tetas de Débora rozaban sobre mi pecho, en un momento Débora me escupió en la cara, yo también abrí la boca, Débora sonrío y empezó a escupir mas seguido. así estuvimos un largo tiempo hasta que Ricardo aumento la intensidad de su cogida y se tenso haciéndola caer y cayendo sobre mi los dos. la clavaba rítmicamente terminando bien profundo en su culo, se quedo un rato mas y la saco del culo de Débora que quedo acostada sobre mi. Su pija salio llena de mierda.
– Te saque la mierda cerdita… puerca sucia… -y se fue para el baño, Débora sonreía y tenia toda la cara colorada. se quedo aun acostada sobre mi.
Ricardo salio del baño ya aseado, se vistió y me dijo que tenia que terminar con su casa, que teníamos trabajo en la productora… y que puta tu mujer me dijo y salio de la casa
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